El temperamento colérico
Características del temperamento colérico
El temperamento colérico se caracteriza por poseer la capacidad de eliminar todos los obstáculos que se le ponen por delante haciéndolo de la manera que sea necesaria.
Rudolf Steiner consideraba que la historia del mundo sería diferente sin coléricos., ya que es el que acompaña siempre a los grandes revolucionarios, a los iniciadores y a los héroes.
Características anímicas, psicológicas del temperamento colérico
Los coléricos son personas en las que se presentan, de manera simultánea, las mayores capacidades de liderazgo con la posibilidad de ejercerlo de la forma más déspota y ejercer un dominio sobre los que le rodean. Lo que determine lo llevará a cabo con una voluntad firme, aunque caiga extenuado para cumplirlo.
Ambas propiedades quedan representadas en el macho alfa de la especie de Gorila de espalda plateada.
Aquellos que comparten partes de su vida con un colérico saben que este puede sufrir explosiones de ira de alta intensidad y corta duración.
Pasan del pensar al actuar sin pararse en sus sentimientos pudiendo parecer que son capaces de controlar el mundo emocional, que dominan la posibilidad de experimentar aquello que hayan decidido sentir.
También son personas que son capaces de controlar el dolor, tanto el físico como el emocional, por ser en ellos menos intenso que en otros temperamentos (melancólico o sanguíneo).
Características físicas
El colérico pisa con pasos cortos y firmes, como dejando oír un «ahí estoy yo».
Físicamente, no suelen ser muy altos y poseen unos rasgos faciales bastante marcados
Otras denominaciones
Al temperamento colérico muchas personas lo denominan Fuego.
El perfil Disc que emplean muchas empresas, especialmente, los departamentos de recursos humanos catalogan a este temperamento con el color rojo, atribuyéndole la capacidad para responder desafíos.
Ejemplo de personajes coléricos
Existen innumerables personajes ficticios coléricos, Ulises, los dictadores históricos, Mao Zedong, Hitler, pero también personas con coraje como Ramón y Cajal o Nelson Mandela